Me prometí a mi mismo no quejarme muy fuerte, estamos de hecho a la expectativa, si ojeo un periódico preconcibo la frase de "A ver que animalada se les ha ocurrido hoy", soy pura esperanza pátrida, oigan. Ya ni me duele España, amputé hace tiempo. El orden del día es robar y que yo pague. La casta política. Putos pellejos. Se echan al monte y hacen los lobos fuego para que no se les acerquen. "Tienen ustedes que entender que estudiar no es gratis" nos dicen los pavos, desde la poltrona. Te lo puede llegar a decir el mismo que cobra dieta y le pagan alojamiento, teniendo su casa en Madrid. Así, con todo su miembro por delante. Yo le soltaba en la Avenida Complutense con un megáfono. A explicárselo a la peña. Oiga, mire usted, que la subida de un 60% en las tasas va acorde a ninguna ley de Transparencia. Que las preferentes siguen existiendo. Que en la actualidad no hay en prisión ningún responsable de la crisis, y que además, no nos hemos tocado un euro el sueldo de diputado. A ese pavo lo entierran en el Jardín Botánico de un guantazo.
Pero que paso, que la felicidad está más allá de sistemas y patrias. Hay felicidad en la miseria tíos, lo he visto, hay felicidad en las desgracias.
Por el pueblo estamos bien, como no puede haber más descojone social pues ya ni nos llevamos las manos a la cabeza, los del Consistorio siguen jugando en la liga regular de los mundos de yupi. Van primeros, con ventaja sobre el resto, pero ni así relajan.
En fin, que estamos de días largos y de montaña a tope, creo que haremos cosas simpáticas estos días, y tenemos sidra, así que que el ministro de turno rebuzne, que escarciaremos otro poco.
Unas fotillos, para pasar el susto de la entrada. Discúlpenme.
No me preguntéis que hace Iván ahí tirado, lo mismo flexiones o algo.
Todas las fotos son del 26 de mayo en adelante, aquí cerrando temporada:
Desde Navamuño, hacia el noreste:
Y por último, una pose política, quitando el Sol.
