miércoles, 30 de enero de 2013

Ampliando el tacto, 26-1-2013

Desde el "Creo que voy a conseguir unos esquís de travesía" hasta el "Esto es una pasada" han pasado diez días.

Corrían los maravillosos días diez, de enero de 2013 cuando las primeras nieves se incrustaron en el hipotálamo del amigo Iván, y decidió que era el momento de ampliar más aún su tacto con la montaña.

Estar desparramado por este mundo de rocas, nieves y barros, le permite a uno estas velocidades, y el viernes ya tenía unos esquís y unas fijaciones mixtas en su poder. Tengo que reconocer que nunca me convenció su coletilla gitana y en un principio pensé que vendría de atracar el contenedor de reciclaje del Decathlon, aunque ha resultado que era todo bastante legal y de mutuo acuerdo. Tras hacerse con unas botas y yo convencerle de que se dejara unos duros en unas buenas pieles de foca, tenía el equipo completo.

Daban casi las diez de la noche del viernes cuando me llamó para preguntarme si le podía echar una mano con el tinglao, a los diez minutos, pone su coche tras el mío, deja a su casi abuela de copiloto y en medio de la entrada de un garaje, alumbrados por las luces lejanas de una gasolinera y toda la potencia lumínica de un Citroen Saxo, me tira en el suelo toda la metralla conseguida gracias a cafés, abrazos y unos pocos euros.

¿Cómo va ésto? - me dice el notas. -Únemelo. Y ahí me ví yo, con mi costumbre de dedicarle tiempo y taller a estos menesteres con diez minutos para dejar solucionao (para los de Cantagallo) el tema. El hecho de que un coche tuviese que entrar con prisa y casi perdiésemos la mitad del material al recogerlo de cualquier manera y quitar los coches, lo obviaremos, para no parecer que tenemos el mismo cociente intelectual que una patata frita.

En diez minutos dejamos todo preparao, y le encargamos a la copiloto, que ante la falta de un remache, le colocara los enganches de las focas a golpe de aguja y cordel, -¡Que no te dé miedo de que quede feo con tal de que no se vaya! ¿Eh? Y claro, decirle eso a una señora que probablemente parta nueces con la mano, y que lleva cosiendo media vida implica que al rato, mi colega recibiese entre sus piezas la Unión Soviética a base de hilo gordo.

Pues ale, venga, a lo que vamos. Que nos subimos a travesear un poco.

El agua después del temporal de nieve la ha liado parda, no es ya la nieve que ha quitado, es que la que ha dejado sirve para hacer encimeras de cocina. Puro mármol bejarano. Pero bueno, para arriba que nos fuimos, entre risas y solazo, acompañados por un grande del tema y con mi cara de flipar a tope después de ver aquí, al compi, aparecer en mallas cortas para subir y bajar entre la nieve y el hielo

Y creo que el pedazo de cacho de trozo de camarero esquiador, se podría marcar un relato de lo que le pareció el tema y mientras yo, os dejo unas fotos de lo que dió de sí el día.

Si no escribimos es porque no hemos parado, a estas horas, yo ando en reposo por un tema sin importancia y mi primo el coleta, colgado en las alturas con los gatos puestos, que aún le gustan más que los esquises. Esta entrada viene con retraso, como los hijos de nuestras madres. Hemos tenido esquí nocturno, trail por la comarca y escalada desde el entonces, ya os contaremos algo.

Las fotos, ahí  van:

El día amanecía tal que así, apetecible cuanto menos, aunque la sierra tenía un brillo que rápidamente te daba a entender que el hielo andaría presente:



Una subida por la Cardosa:


Disfrutando del sol en un canchal con unas formas heladas muy raras


Mirando hacia la serrota, un día espectacular:


El que escribe esperando la caña que había pedido:



 Los del pueblo, esperando a que pastara el rebaño:



y cuarenta horas después, con nocturnidad y alevosía, desde casi el mismo sitio, amando a la luna llena:



Es un placer, como siempre. 

Unos abrazos.


Podéis elegir una puntuación abajo a la izquierda. 

Si votáis, salvaréis a una salamandra


Salud y nieve.


jueves, 24 de enero de 2013

Energía postevaluativa y bastante nivológica.

Pues nada, parece ser que se han acabaDo los exámenes y hasta hoy no he podiDo escribir de lo ocupaDo que he estaDo haciendo gilipolleces. Los exámenes bien, que es lo que le digo a todo el mundo para no dar muchas explicaciones. 

Lo demás mejor. Por ejemplo el martes por la tarde, subimos Arturo, (que no le conocéis pero ya le conoceréis)  y yo a la plataforma, a dar un paseo, y acabamos haciendo snow por la carretera, no eramos los únicos que tuvimos la misma idea. Por allí andaba Daniel, mas conocido como 'El Canario' , estandarte del Balonmano Bejarano, ahora tan de moda, y Miguel, mas conocido como Miguel y que estudia ingeniería. 

Yo lo vi fácil cuando bajo Arturo y también hice mis pinitos con la tabla, por supuesto me pegue el par de hostias de rigor. Adjunto documento gráfico de Arturo y de Iván para corroborar que es verdad lo que cuento. 


           

Después de ver como esta la carretera, he inventado el quad-snow, pero aun no lo he llevado a la práctica. Consiste en atar a Arturo con su tabla al quad y darle cera carretera arriba, lo que pasa que no esta muy convencido, ya encontrare alguien más valiente...



El Miércoles fue otra movida, quedé con Arturo y Óscar Sánchez (por Óscar Sánchez no le conocen ni en su casa... (El Vaci para que nos entendamos)), pues eso, que quedamos a las 9:30 los tres y Óscar Sánchez llegó a las 10 con su perro Darco. No pasa nada, porque estamos acostumbrados a quedar con Imad. 


A las 10:30 estábamos saliendo de la entrada a la dehesa de Candelario, con 20 cm de nieve. Estaba blandísima asi que tomamos la determinación de raquetearnos. Momento cumbre para Arturo que en ese instante era el hombre mas feliz del mundo, la foto lo demuestra.  

        



Pues con las raquetas y poquito a poco conseguimos llegar a nuestro destino.(Que no sabiamos donde ibamos ni nada pero bueno). El refugio de Hoya Moros.  Donde paramos y aprovechamos para secarle el pie a nose quién, que se había caido en el primer regato de la dehesa y había llenado la bota de agua. (Cuando todo el mundo sabe que puestos a llenar botas de líquido, que sea vino, pues nada).

Arturo y Vaci estaban haciendo fuego y como un servidor enseguida se aburre y se agobia se fue a hacer unas fotos. 




Aquí Darco, que le pasa lo que a mi y se aburre enseguida y se vino conmigo, y el refugio al fondo. Donde estaban calentándose intentando hacer fuego un capataz forestal y un gasolinero . Ni que decir tiene que no lo consiguieron. 

La foto que buscaba cuando salí del refugio era para mi primo Jaime.  La foto de los meandros nevados y helados. Es que este verano subimos por aquí y se preguntaba como seria todo nevado, pues pese a la niebla y la medio ventisca algo se aprecia. Fijarse bien. Para Jaime, ¡Aunque ya subiremos cuando se te cure la rodilla!



Y con esas mismas nos bajamos, a las 5,30 estábamos en el coche. Y a las 8 en el rocódromo  pero eso ya es otro tema... (Algún dia si nos dejan os enseñamos una tarde de entrenamiento).  En definitiva, buenos días en la nieve y lo que nos espera este finde. O eso me prometen por cable interno. 

P.D. Teníamos mas fotos con el móvil de Vaci pero le pasan lo que a él, que llegan cuando llegan y no hay que darle mas vueltas...

P.D. Como nadie nos quiere patrocinar tenemos que buscarnos la vida para seguir pillando material. Lo siento por los que os llevo pegando la tarde, pero ahí va. 



viernes, 18 de enero de 2013

No es que quiera justificarme...

No es que quiera justificarme, de normal no hablamos mucho de política  ni solo corremos, ni matamos siete mil cerdos en el garaje... Hacemos otras cosas más, y menos interesantes.

Lo que pasa es que estamos de exámenes. Que para el que no sepa lo que es esto, es como cuando estas de fiesta, hasta las 5 de la mañana, estás bien (no exámenes), lúcido, te ríes,  haces cosas, ves cosas, piensas cosas. A partir de las 5 (exámenes) entras en otra dimensió; solo queda tu cabeza y tú, ni ves, ni oyes y casi ni sientes. Eres como los cerdos del señor  Mateo. Donde te lleven. De bar en bar sin saber mucho a que te dedicas, de examen a examen sin saber mucho a que te dedicas...

Pero siempre hay momentos de medio lucidez en los que te puedes escapar de tus colegas y hacerte el sobrio e intentar hablar (y más) con una señorita, o hacer la 13-14 e irte para casa a dormir, o irte al rocódromo o irte a correr. Pero nada mas, porque no hay mas tiempo. Mañana tienes examen.

A lo que iba, que los exámenes se acabarán algún día, para mi el 21 y para el desempleado-ni ni-estudiante de teleco ni idea. Pero se acabarán algún día, entonces es cuando verdaderamente podemos disfrutar. 

Mientras tanto lo dicho, estudiar, escalar y correr. De lo primero mucho de lo segundo poco y en rocódromo y de lo tercero poco y mal. 

P.D. En nochevieja se afeita uno, en los días importantes se afeita uno y se corta el pelo, y hoy debe de ser el cumpleaños de alguien o debe venir alguien a tocar al bar para la que merezca afeitarse y cortarse el pelo...



P.D.2 Para pasar la resaca estaría guapo aprender a esquiar con los de travesía por sitios como estos, ¿Que no? 

De la felicidad, la lluvia y el entrenamiento.

Me da pereza la burocracia así que lo dejo aquí escrito. Quiero donar todo lo que pueda donar este trozo de carne con patas que a su cadáver incumba. Con lo que sobre pueden hacer albóndigas. Me la trae al fresco.

Bien. Sigamos.

Vivimos en tiempos de crisis. Tiempos escalofriantes para nuestra sociedad. Una crisis acrecentada por un estado previo de puestazo social. Decía un colega mío que lideró Apple, Steve Jobs (Esteban Oficios, pa los del barrio) que tenía la solución a todos los problemas de comunicación social, que había creado "LA NUBE", bueno dijo "THE CLOUD", porque él nació cerca de un Starbucks y se le iba la pelota mogollón.

Nadie le dijo a mi compi, que la tal Nube esa, ya llevaba instalada por estas tierras de Don Quijote años ha. Que un montón de banqueros, políticos y quijotenianos, impulsados por los maravillosos eslóganes de los grandes medios, habían montado un tinglado del carajo; un casino donde el mileurista compraba áticos en Gran Vía, el banquero te daba cincuenta kilos (por si lo lee alguien de Valladolid, de pesetas) aunque tu patrimonio y tu aval fueran un chándal de Adidas y una colección de mortadelos. Y el político cambiaba contratas por un puesto en. Y ahí estábamos,en la nube, flipándolo, ni el LSD ni leches, carajo, ¡El siglo XXI! ¡Droga dura!

Y después de esta apología del terrorismo, a lo que voy, no sé si es cosa mía, o verdaderamente "la pobreza" nos une. Y me toca los cojones usar las comillas, pero para algunos "los hay que están peor" y  otros "están peor". Pues eso, que "la pobreza" nos une. Y de la unión, la felicidad. Tenemos menos, tenemos nada, en algunos casos; prácticamente no viajamos, no gastamos y estamos en la puta cola del INEM, pero nos vemos más que nunca, compartimos más y derrochamos menos y vaya puta mierda que tenga que haber sido así, pero que no pare esta felicidad compartida. 

Rezo (mentira, no rezo una mierda) para que se descabece España, para que se ahoguen en un charco todos los cagatintas y capullos trajeados del puente de mando, para recobrar la humanidad y para, sobre todo, no perder las buenas costumbres que vengo observando en los últimos tiempos. Hay mucha vida. Hay mucha mucha vida señoras, señores y Bárcenas.

Quería decir algo acerca de lo que primero pensé era un Parque Natural de Navarra, luego un zoológico al aire libre en Cantabria y que finalmente me explicaron, era un bastardo más de los cientos de miles que pululan por España tomando decisiones para las que no están capacitados, actuando con su bienquedismo gatuno que incita al sopapo y malversando a tutiplén. ¡Pobre Bárcenas! Será abucheado, juzgado, condenado, indultado, elegido asesor de algún presidente muy honrado y contratado por Telefónica. Hay que tener mala suerte.

¿Y qué me dicen de la vicepresidenta? ¿Eso es un Goya no? (Un Óscar no, que no sabe inglés) ¡Qué carita de pena! Recuérdenme, que le adjunte un caramelito y un pañuelo en las próximas elecciones, fue conmovedor.

Siguiendo este discurso infumable, digno de un gaznarápido de mi especie, vamos al día. 

Para nuestra calaña, la del abrechapas y la mía, el refranero debe ser revisado. ¿Qué es eso de "al mal tiempo buena cara"? Es redundante y de mal gusto, la lluvia es el bien. Agua, frío, charcos, viento. Bien. No nos van muy bien las cosas, tenemos nuestras movidas, como todos ustedes supongo, pero lo fácil sería tirar la toalla. No se me vengan abajo, no esperen que pase la tormenta y hagan el favor de bailar bajo la lluvia en todos los sentidos. 

En el tema de huir de nadie, Iván va como un tiro, dosifica mucho, y le está yendo de lujo, come desnivel positivo como yo me comía medio kilo de tocino hace unos años. El que escribe sin embargo se ha equivocado. No intentéis intensificar el entrenamiento después de un par de meses parados. Lo de "te vas a quemar" es cierto. Estas semanas me he fundido, "mucha carga" para alguien que en otoño no pisó el barro. Es raro que un amigo te mire mientras entrenáis y te diga: "Tío, tienes que parar", y te des cuenta de que el fallo estaba ahí. Así que aquí andamos ahora, enfriando y esperando volver con ganas, por eso en lugar de salir anoche, puse la tele y os he metido la tupa de "actualidad". Tiraré de monarquía y diré lo siento, no volverá a ocurrir.

Bejarlandia cada día es más infinita, cada semana encontramos un nuevo camino, una nueva ruta, o un nuevo punto de vista de la zona. Nuestra relación con ella va viento en popa e Iván está casi convencido de pedirle la mano de la ciudad al alcalde. Si no se la ha pedido ya es porque creemos que el tono bucólico, romántico, enamoradizo e idealizado en la relación hombre-lugar del asunto no lo entendería muy bien el señor este y lo mismo le da por inventarse un nuevo campeonato o una nueva feria, o incluso nos construiría una fuente en medio del campo de fútbol y nos sentiríamos algo culpables por el fomento de la caspa.

En fin, les deseo a todos un buen fin de semana, si sigo escribiendo no es ya solo por la válvula de escape que este espacio me concede, hay gente que le agradan unas líneas, y no seré yo quien no invite a algo tan barato de vez en cuando. 

Iván sé que en unas horas se meterá un entradón de los que hacen historia. Está ahí, cogiendo el aire que le dejan los estudios y el trabajo.

Todo lo que nos proponemos no estamos seguros de conseguirlo, pero estamos seguros, de conquistar la felicidad. ¿Qué buscamos? ¿Quizá vivir? K.Jornet





lunes, 14 de enero de 2013

El tacto del suelo.

Hay días mejores y días peores.

Tomad frase inútil, de aperitivo. Pero es cierto que hay días en los que la energía se ha caído de la cama, días en los que sonríes poco y la pereza te apodera.

Dentro de este invierno del carajo, de escasa nieve, desde antes de ayer la tendencia ha cambiado y el frío y algo de nieve se ha apoderado de Bejarlandia. Aquí es cuando nuestro corazón dividido en varios trozos se vuelve algo loco.

Por una parte, este mal tiempo para muchos, para mí y el colega de las chapas, es buen tiempo, el suelo ha endurecido, podemos correr pisando nieve, el cuerpo funciona bien con bajas temperaturas y el paisaje es la rehostia, que narices.

Por otra, las nubes y la posibilidad de chubascos nos dejan un poco apartados de la cuerda, cosa que a nuestros días de exámenes le viene bastante bien, ir a escalar un rato requiere un tiempo del que ahora no disponemos. Aunque las sesiones de rocódromo y risas con la familia se suceden siguiendo el patrón de martes, jueves y domingos y empiezan a despegarse los turrones de los antebrazos. Un emigrante como yo, que ahora las obligaciones le permiten estar en la tierra, solo puede sonreir por la libertad aquí brindada.

A lo que iba, hoy me he levantado aplomado, cada uno tiene sus cosas y esta noche aparecieron las mías, asi que, siguiendo mi sentido de respirar profundo y quitarme las telarañas del espíritu, he mirado por la ventana y he tardado menos de cinco minutos en trajearme, atarme las zapas y enfilar el camino a Valdesangil, rumbo a La Cabezuela, a pegarme un buen trote mañanero. 

Temperaturas negativas, subida de la presión, el humo de las chimeneas del pueblo manteniéndose en el suelo, y ya en los picos, algo de nieve en el suelo. Convertir la rabia en fuerza era algo impensable hace un tiempo, pero cuando lo logras, el chute que le entra el cuerpo derrumba todos los males.  

Creo que no me hacía falta más, pero el día me lo ha querido brindar, una imágen tremenda desde arriba, la sierra invernal, y aunque no hay nieve prácticamente, no nos engañemos, me produce inmensa tranquilidad nuestra mole de granito cubierta de blanco y ese silencio que me han brindado las ocho y media de la mañana.

Tengo que decir, que ayer quedé con Iván para desayunar a esa hora, y que nada más mirar por la ventana, se me olvidó por completo. Compréndeme compi, pero yo te hubiera regañado si hubieses renunciado a ese impulso del alma por haberte tomado un café conmigo. Luego he leído que te quedaste dormido, que tampoco estuviste a la hora de la cita. Dignos impresentables pues de este lunes tan magnífico. Saldremos por la tarde noche, si alguien se apunta,a trotar por la comarca y resolver los problemas del mundo sintiendo el tacto del suelo.




Mente y situación. 14 de Enero.

Me voy a poner serio, aunque con anécdota real previa.

Me acaban de llamar a casa, descuelgo, y ocurre lo siguiente:

-Soy Mateo el de Hervás, ¿Hay hueco para matar ciento cuarenta cochinos para sacarlos el viernes?

Y ahí estaba yo, al otro lado de la línea, maquinando una respuesta. ¿Cómo le digo al Mateo éste que el número al que llama ya no es el del Matadero? Mi neurona (que por cierto se llama Ventisca, ya que solo tengo una que tenga un nombre guapo) y mi caridad humana no podía saltar con un "Caballero, se ha confundido".

-Dame un minuto Mateo-. Le digo. 

 Así que ahí estaba yo, con el boli en la oreja, que Mateo me había pillado estudiando y mi pijama de Barrio Sésamo, dilucidando en cómo podría yo matarle a este hombre ciento cuarenta cochinos antes del viernes. Y no os lo querréis creer, pero se os pueden ocurrir muchas idioteces intentado darle respuesta al problema. Cuando Ventisca dejó de maquinar, decidí que en un complejo agropecuario de 90m2 de tarima flotante, con siete cuchillos sin afilar,  una tabla de cortar en la que se me sale una gallina cuando la preparo para cocido, y mi puto pijama de Barrio Sésamo, no estoy yo en condiciones de darle buenas noticias a Mateo.

-Mateo, lo de los cerdos, que imposible, acabo de pasar la aspiradora y no creo yo que se llamen cochinos por ducharse a diario. Además, mi padre tiene la cochera llena de trastos y no me caben todos, pero mire a ver si llamando al matadero le pueden hacer a usted el genocidio sin mayor problema. Disculpe la espera y que tenga suerte.

Y cuando pensaba que oiría colgar su teléfono, Mateo vuelve a hablar, -Que si no se puede pa este viernes, los aguanto hasta el lunes o el martes, ¿eh?- me suelta. ¿Qué hago yo? ¿Le invito a una caña y le cuento que de matarife tengo lo que Heidi? Me rendí, -Mateo, no es aquí el matadero, se ha confundido usté de teléfono. Y le dije usté, y creo que por eso me ha entendido y ha colgado.

Después de esto lo lógico habría sido volver al estudio, pero que te llame Mateo, no ocurre todos los días, y tenía material pendiente que meterle al Blog este al que me tiene encadenado el colega Iván.

A lo que íbamos.

No hemos hecho los deberes estos días, líos de faldas y de exámenes, somos gente responsable y un poco ridícula, pero responsable.

El miércoles fue un día de locos, mucho trajín, y pese a que el martes dijimos -¿Mañana tiramos al Cancho la Muela a última hora?- después de todo el día exprimiendo neuronas, lo hicimos (No, esta frase no tiene ningún sentido sintáctico, soy imbécil). Así que antes de las ocho de la tarde, salimos de la biblioteca y unos minutos después enfilábamos la subida de Su Puta Madre, (lo del Arca Madre es un anglicismo) dirección Llano Alto. Arriba las nubes casi estaban ya a ras de suelo y un aguanieve mojabobos nos acompañaría el resto del camino. A Iván los llanos no le gustan, es un subidor nato, dice que ha sacado esa conclusión después de que le adelantara un ganadero en zapatillas de estar en casa que iba comiendo pipas el otro día.

 Eso unido a que la ruta incluía un par de kilómetros de carretera, que yo opino que están hechas para los coches, hicieron que fuéramos con la mueca torcida hasta encarar la ladera norte del Cancho. La conversación versaba sobre temas interesantísimos e importantes, que ahora mismo no recuerdo pero Iván dijo algo así como: "Esto es para grabarlo y subirlo al Blog, somos retrasaos mentales" (Según la Real Academia de Cantagallo de la Lengua, La R.A.KÍKIRIKÍ, los participios terminan en -ao, -ío, "has cantáo","has comío", lo comento como aclaración)

La subida al Cancho entre las nubes se hizo llevadera, aunque descubriendo que llevar un frontal de LED con semejante niebla, implica prácticamente el uso de gafas de sol. Arriba al llanear, nos desorientamos un poco e Iván decidió perdonar 200 metros de llaneo hasta la cumbre porque el mareo nos empezaba a afectar por la niebla, llevábamos hora y media corriendo y había que bajar, nuestros jetos los demuestran:



Iván, antes que abrechapas, era el fotógrafo de los cazafantasmas y de ahí mi aparición mariana entre lo negro.


La bajada del cancho la hicimos por el cortafuegos nuevo, son dos kilómetros de pendiente rondando el 20% de tierra muy blanda donde te hundes bastante, luego de nuevo a la carretera y de ahí vuelta a Llano Alto, donde comenzó mi particular calvario de calambrazos en el llaneo, que por suerte cesaron y pudimos bajar a ""buen ritmo"".

Por aquí queda la ruta, a la que la falta la subida Béjar-Llano Alto por un fallo del Endomondodemonio éste:


Creo que duplicaré entrada para no daros tanto el tostón en ésta.

Salud y Montaña!

miércoles, 9 de enero de 2013

La rutina es la libertad.


Veo en estas fechas que mucha gente se queja de volver a la rutina. Eso es porque no os lo sabéis montar bien. Pero pensad en esto, si no sois capaces de ser feliz la mayoría del tiempo del año, (en la rutina), pegaros un tiro. Pero atinaros bien, no seáis cafres y lo único que hagáis sea joderos media cara, como ya le paso a un colega mio...  Dejemos los consejos suicidisticos y volvamos a la rutina, que es de lo que se me ocurrió escribir mientras patinaba. Pues ahí esta mi rutina. Estudiar, comer, patinar un poco (o echarse la siesta, me da igual) volver a estudiar, que llega un momento que estudiar hasta mola (negare siempre haber escrito esto) e ir a correr o al rompodromo. (El rompodromo es un sitio para romper, bien sean las muñecas, los brazos, la espalda, estufas, etc etc, y echarnos unas buenas risas como por ejemplo ayer). Y venir a casa y descansar. Pues esta es la rutina. Un verdadero lujo. Los que tanto os quejáis de la vuelta a la rutina deciros que hacéis las cosas mal, PENSADLO.  En mi rutina de hoy entra Imad a las 20:00, después de casi toda la navidad sin montar en Trabuco, con un constipado sin curar, con 2kg mas de los turrones, se le ocurre ir al Cancho de la Muela. 19 km con 700 metros de desnivel positivo. Lo peor es que iremos, pero eso es otra historia que ya si quiere os la cuenta Imad. Que yo hoy con volver a casa sin echar la merienda tendré bastante...



Vistas desde el Cancho de la Muela. (si vas de dia claro, hoy no veremos ni a cantar)

sábado, 5 de enero de 2013

Iñaki Ochoa de Olza.

Son las 4 52 de la mañana, una hora como otra cualquiera, aquí estoy esperando a los reyes pero no vienen.
En verdad estoy comiendo cereales con leche mientras pienso  que es lo importante en esta vida, a que hay que darle importancia y con que hay que implicarse. Siempre que me asaltan estas preguntas acabo acordándome de un documental sobre Inaki Ochoa de Olza. Un alpinista Navarro. 
Considero  que este documental debería ser una referencia para todo aquel que le guste el monte. Me gustaría que fuera el documental o la historia de cabecera de mi generación, igual que en su día fue el intento de ascensión al Eiger por la cordada de Toni Kurz, Andi Hinterstoisser, Edi Rainer y Willy Angerer. Algo que todo el mundo deberia ver una vez en la vida. Algo épico. Sin mas dilación, (Joder que palabras uso, parezco Imad) os enlazo el documental y solo espero que perdáis los 22 minutos que dura, que seguro no lo lamentáis.  http://vimeo.com/9866577

viernes, 4 de enero de 2013

Viva el baloncesto y la plaza de la Constitución

Mucho antes de saber hacer un ocho (con una cuerda, que con un boli aún me cuesta), era yo un chaval cualquiera, de los que llevaban rodilleras, se encaprichaban con los chándales del tal nike, no perdonaba la merienda y, con toda mi cara de bollo, jugaba al baloncesto en la Plaza de la Constitución.

Jamás, en veinte años, recuerdo que esas canchas, por así llamarlas, estuvieran en perfecto estado, sin contar con que en las canastas hubieran redes, rara era la época que el cuadro no estaba torcido, o el aro desplomado.


Pero nos daba igual, y si a lo largo se jugaba al baloncesto, o se utilizaba únicamente una de las canastas para poder jugar más a la vez, ante la algarabía de muchachos; a lo ancho, entre sudaderas y mochilas, otros jugaban al fútbol o incluso al frontón con aquél cartel de prohibida la entrada a menores de ocho años presidiéndolo todo en la fachada del bloque que hacía esquina.


Siempre me pregunte, incluso cuando aún creía en Dios, fijaos si hace, por qué eran ilegales los chavales grandotes que pasaban las tardes de los sábados en una de las canastas sudando como un pueblerino en el metro. Por qué no podían ellos aprovechar unas canastas con medidas reglamentarias, si allí no había niños ese día sin tener que pensar en el cenutrio que se le había ocurrido colocar aquel cartel inútil. Hacía tiempo que en la sociedad había muerto el sentido común, y las señales, carteles y leyes estúpidas pretendían acorralar al ciudadano.


Crecimos, cambiamos de hábitos, se puede decir que incluso maduramos. Oliver y Benji, los Rugrats o el inspector Gadget se verían acuchillados por una pandilla de muñecos ridículos del Japón, por aberraciones que nuestras generaciones venideras aprenderían como nuestros padres se aprendieron los Reyes Godos.

Pero allí seguía, la plaza de la Constitución. 

Y a ella volvimos, de quedar en el cole pasamos a quedar en el instituto, llamándonos al fijo de casa, por sms, por el messenger, por el tuenti e incluso, por el jodido Wasap ese. Y las épocas de partidillos en Filiberto se alternaban con las épocas del tres contra tres, o el cinco contra cinco a cancha completa en la de la plaza de la Constitución.


Eso estaba ahí. 


Hasta que volví hace dos semanas,


Los de siempre, la pandilla. Me crucé por la calle con el triplista, y tras la conversación banal, salieron las ganas. -¿Un basket o qué? -Pues claro tío, hablamos esta semana. Pero a las dos horas me tiraron en plan, - Pero que dices tío, ¿No sabes que ahora es un parking?


Mi gozo, en un pozo. Que me entristezca tal cosa, es algo lógico, como el que echa de menos la casa de la que se muda. Pero quería saber el por qué.


NO HAY POR QUÉ. 


Una animalada más, como tantas otras. Encima de la misma linea de seis veinticinco han delimitado el parking, líneas amarillas se cruzan con líneas azules y ellos, y su neurona compartida, han decidido, que qué mejor viene en un parking que una fuente de granito. 


Sois una mafia. Putrefacta. No sé ahora quién de vosotros es el que necesitaba aparcar, ni a qué primo vuestro le jodían los posibles balonazos que pueden darte al coche desde una cancha de baloncesto, ni que vendedor de granito necesitaba de vuestros favores. 


Sé que habéis vuelto actuar con vuestro pene por delante. Sin proyecto. Sin programa. 


Improvisando.


Ojalá vuestros hijos y vuestros nietos, no puedan nunca jamás disfrutar de meter un triple en una cancha callejera. En una cancha libre. En una cancha de las que te enorgulleces de tener cerca. 


Aparcad bien, al menos, y allá os lleve la parca a tomar por el culo cuanto antes. Pues claro está que esta tendencia no acaba nunca, si no es que dejáis de vivir.


A la mierda con ustedes.

Queria contaros que


Hoy he lavado las Trabuco, bueno las ha lavado mi madre si no quiero faltar a la verdad.  Las Trabuco son uno de los objetos que mas felicidad pueden proporcionar a una persona, después de las drogas y los aviones teledirigidos. Me llena de tanto orgullo y satisfacción verlas tan limpias, tan amarillas, tan perfectas, tan bonitas, tan... que tenia que compartir esto con vosotros... 

                   
                                   

Otro día os las enseño llenas de mierda...

Quería hablaros de


La falta de humanidad en las épocas que corren.

Esta mañana me he encontrado con Luis, al que he saludado y preguntado por su familia, y me ha respondido que todo muy bien, que como siempre.

Bueno, a lo que voy, ¿De qué cuadra han salido aquellos que al encontrarse en la puerta de un bar contigo, intentan entrar antes que tú? ¿Dónde quedaron los modales?

Reconozco que soy un caso extremo de civismo, del tipo que si me encuentro a otro como yo en el momento de tener que entrar en algún sitio, queremos ceder el paso a toda costa, provocando atascos épicos si se trata de una zona concurrida. No se trata de eso tampoco, pero, al menos, un primer: "Pase pase" si se trata de alguien mayor, "pasa pasa" si puedes coleguearle o un "tssshha chiiiva" si lo que entra en el garito es una cabra, debe guardarse siempre, creo yo.

Son casi las siete, y el cacho de trozo de limón, patrón generador del soporte donde se incrustan estas líneas, (me acojono de mi periodística, en serio) va a salir de currar. Nuestra cita de hoy consistirá en unos minutos para ir a comprar butano. Las actividades alucinantes y de exquisito asombro que nos juntaron en su día, no serán puestas en práctica hoy. Ni se corre, ni se esquía, ni se escala. Hoy se va a comprar butano, y esperemos que no nos encontremos con algún estudiante de primero mis cojones en alguna puerta, porque chupar limón te deja la cara de pésima forma, y siendo hoy viernes y con el solete de estos días,  no se puede estar agriao.


La Nostra Vida


Yo soy el otro.

El pequeño. Vivo en Madrid, aunque solo de boquilla. Burocráticamente, digamos.

Nací en Béjar. ¿En Béjar? Sí, en Béjar. Era enero y había nevado, y mi madre rompió aguas en plenas Olivillas. Llevaba un par de meses de retraso, el cual aún me dura, y salí con una prisa del carajo. Me impulsé con los bracitos y menos mal que Mamá hizo un círculo con sus brazos y nada más salir reboté tres veces en cada uno antes de llorar. Os podréis imaginar: Nieve, Olivillas, impulso... No sé qué pretendía, la verdad. Pero en La 2, he visto pingüinos en tobogán con menos inercia.

Mi vida y mi alma se encuentran perdidas en un círculo con centro en Béjar y de unos pocos kilómetros de radio.

Lo amo, me encanta. Como las niñatas a los niñatos y viceversa de unos dieciséis años después de que han intercambiado saliva dos días antes. No, de verdad. Me gusta Béjar y me joden los bejaranos, por regla general. Béjar es lo suficientemente pequeña para que cualquier cenutrio con un poco de dinero, o coche potente o peinado exquisito pueda creerse importante, y lo suficientemente grande para que tan solo haga el ridículo.

Béjar es una ruina y una joya. Pero por encima de eso Béjar tiene un entorno alucinante para el frikismo que al colega Iván y a mí, nos incumbe.

Tener esta forma de vida y ser de Béjar es como gustarte el vino y vivir en un racimo de uvas. Es perfecto.

A Iván no recuerdo cuando le conocí, aunque de vista siempre me había aparecido un gilipollas. Recuerdo que él era ciclista y yo era gordo, y poco más, porque por aquel entonces Cantagallo aún no figuraba en los mapas y no podía tener más señas.

Iván es un tío que me apoya en todo, si ya ha quedado y le propongo algo, desqueda:


- Oye tío, vamos a trepar, pues vale, sin dudar.

-Tío que llueve, vamos a correr. Pues a correr. Os sonará raro, pero cuanto más llueve más nos da por correr.

- Iván que he quedado, que me voy a follar, pues venga, a follar. No Iván no, léete las instrucciones de como ser un limón, no me seas animal, que ahora no toca venirte.

Sé que este Blog es indigno, que incumple las normas de la RAE y se salta un par de claúsulas que la ONU consideraría una violación de la soberanía nacional. Que muchas veces habrá sido actualizado desde un móvil situado en medio de alguna piedra y que las dos mitades del limón, aprobaron la ESO por un error en la secretaría de nuestro instituto.

Pero visto lo alucinados que os habréis quedado al ver el manejo de las siglas de organismos, instituciones y sistemas educativos para dotar de cierta profesionalidad periodística nuestros escritos, continuaremos escribiendo nuestras andanzas por la madre patria bejarana y otras islas del mundo, al igual que seguimos escalando pese a que nos han dicho que somos a este gremio lo que el Rey de España a la estabilidad bípeda.

Aquí os dejo una imagen, hay días que se nos acabala luz y acabamos de cualquier manera, Este es Iván, de faro del pueblo:



Salud y Montaña.



jueves, 3 de enero de 2013

Por el principio.

¿Lo primero será presentarnos y decir de que va a ir esto no?. Pues yo soy Iván, y un resumen rápido para quien no me conozca (que no creo que haya nadie que no me conozca), seria el siguiente. Por orden cronológico, Ex-ciclista, quadtrero, escalador,amante de la montaña, trailrunner (que corremos por el monte vaya),  abrechapas y tiracafes, y en mis ratos libres estudio ingeniería. 

Y ahora que ya me presentado debería presentar a mi medio limón, a mi compañero de cordada, con el que corro,al que le pregunto si va a llover y básicamente al que busco cuando tengo algo muy raro o loco en mente y solo se te ocurre una persona capaz de acompañarte. A mi amigo. Imad. Imad es un impresentable, por lo cual que se intente presentar él si le da la gana en su primera entrada. (Y si es capaz)

Dicho esto solo decir de lo que (creo) hablaremos en este blog. De monte, bien sea de escalar, correr, de esquiar, de que tiempo hará... De los proyectos, viajes, encadenes, y dia a dia que nos vayan surgiendo, de la ingeniería creo que no, de nutrición (o desnutricion), de música  de política (igual Imad) y de todo lo que se nos ocurra... Puede ser buenísimo o una puta basura. Se ira viendo...




Aqui los dos colgados,  en el Cancho Bermejo.